Documento elaborado para este encuentro

“Ha llegado la hora de la mujer que piensa, juzga, rechaza o acepta,
y ha muerto la hora de la mujer que asiste atada e impotente
a la caprichosa elaboración política de los destinos de su país”
Evita, 12 de marzo de 1947

Por la profundización del modelo nacional:

Desde hace 6 años venimos avanzando en la recuperación de la Dignidad Nacional. A partir del 2003 pusimos al Estado y a la política, nuevamente, como herramientas de transformación de la sociedad, después de más de cuarenta años de destrucción de la Nación. La recuperación de empresas, la reconstrucción de la industria nacional, la creación de más de 3.000.000 de puestos de trabajo, la reapertura de paritarias para discutir los aumentos salariales y mejoras laborales, la construcción de viviendas, la política de derechos humanos que nos permitió reivindicar a los militantes populares que dieron la vida por la liberación nacional, la reestructuración de la Corte Suprema de Justicia, son los lineamientos centrales de esta Proyecto de País basado en la Soberanía Política, la Independencia Económica y la Justicia Social.

Mientras en los países centrales, en el marco de la crisis financiera internacional, despiden trabajadores y fortalecen con financiamiento estatal al capital financiero, en la Argentina estamos discutiendo salarios, defendiendo el trabajo e interviniendo con el Estado en la reestatización de las jubilaciones, antes en manos de las AFJP; entre otras medidas. Es decir, el Gobierno, lejos de tomar las recetas neoliberales de ajustes para enfrentar los efectos de la crisis, continúa eligiendo el camino de mayores salarios -mayor consumo - mayor producción - mayor empleo. Y esto muestra la clara voluntad de nuestra Presidenta de seguir avanzando en el camino de la redistribución de la riqueza.

Sabemos que el camino hacia la Justicia Social nunca es fácil de transitar. Ante este panorama de crecimiento e inclusión, vemos resurgir la presión de los grandes grupos económicos que pretenden frenar el proceso de reconstrucción del Proyecto Nacional. Estos sectores, ligados al capital financiero, intentan concentrar aún más las riquezas e impedir el proceso de fortalecimiento del Estado, el cual se sustenta en la recuperación del patrimonio nacional para la implementación de medidas populares.

Frente a los ataques al modelo, las y los trabajadores cumplimos un rol protagónico para su defensa y fortalecimiento. Por eso ahora, en esta etapa de consolidación, estamos convencidas de que las y los trabajadores continuaremos siendo el motor central del Proyecto Nacional. Y en esta instancia, para lograr avances sustanciales en el fortalecimiento de un modelo económico, cuyo objetivo es alcanzar la justicia social plena, resulta imperioso que la representación política exprese los intereses nacionales. Por eso en estas elecciones, debemos llenar el Congreso de Compañeras y Compañeros que estén comprometidos con dar la batalla por la profundización del modelo.

La Ciudad y la construcción de un modelo nacional:

La “gestión Macri - Michetti” sostuvo como lineamiento central la transferencia de recursos estatales hacia el sector privado. El despido de más de 3000 trabajadores estatales y la falta de aporte al sistema previsional de los trabajadores; el desmantelamiento del sistema educativo con el congelamiento de los salarios docentes; la inacción en materia de infraestructura educativa; la destrucción del sistema de salud donde faltan insumos básicos para la atención de los ciudadanos; el colapso del sistema de trasporte; el vaciamiento de las políticas destinadas a la promoción de los derechos de las mujeres; los negociados multimillonarios por el remate de los espacios públicos en favor de las empresas inmobiliarias, son claras muestras de la utilización del Estado como una empresa propia y prebendaria.

Desde el Frente para la Victoria y el Frente Encuentro Popular para la Victoria tenemos hoy la posibilidad de construir una alternativa política para frenar este vaciamiento del Estado porteño y recuperar la Ciudad para todas y todos. Este espacio tiene la potencialidad de interpelar a distintos sectores para la consolidación de una fuerza política que el 28 de junio demuestre que una Ciudad inclusiva es posible.

El rol de las mujeres en este proceso:

Sabemos que la discusión sobre la representación política de las mujeres o la conquista por los espacios de poder para las mujeres debe, necesariamente, estar ligada al proyecto de país que éstas representan. La primera Presidenta electa por el voto popular, Cristina Fernández, expresa el modelo basado en la reconstrucción de la industria nacional y el trabajo como eje ordenador de un modelo de sociedad basado en la justicia social.

En estos 6 años hemos avanzado en la conquista de nuestros derechos como mujeres: la disminución de la brecha salarial entre mujeres y varones; la creación de la jubilación para amas de casa, la extensión de la licencia por maternidad y paternidad; las pensiones para madres de más de siete hijos; la creación del Programa Nacional de Derechos Sexuales y Reproductivos; la ley de Educación Sexual; la aprobación de la ley de Protección Integral para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra las Mujeres en los Ambitos en que se Desarrollan sus Relaciones Interpersonales, entre otras.

La legitimidad social que expresamos las mujeres está ligada al rol que cumplimos en distintos momentos de nuestra historia: desde Evita, que condujo el proceso de la conquista del voto femenino y el avance en los derechos sociales de nuestro Pueblo, pasando por las militantes que, en los ‘70, dieron la vida en la lucha por la liberación nacional, las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, las trabajadoras de los distintos gremios resistiendo la implementación del modelo neoliberal, las jubiladas como Norma Plá que pelearon contra el congelamiento de las jubilaciones, las pequeñas productoras que batallaron por la tenencia de la tierra, las estudiantes universitarias que lucharon contra la ley federal de educación, hasta las maestras que fueron forjando a las mujeres como uno de los sectores populares de mayor conciencia crítica y compromiso con nuestro Pueblo.

Hoy, por toda esta Historia, las mujeres expresamos la lucha contra la injusticia social y la denominada “nueva política”. Sin embargo, hay algunas que pretenden usufructuar esos avances instalándose, con ayuda del Grupo Clarín, como las “mujeres que vienen a renovar la política”, pero no nos engañan; Carrió y Michetti representan dos caras de la misma moneda. Sabemos claramente que, a través de la política que desarrollan, son funcionales a los intereses del poder económico financiero y los sectores más retardatarios de la iglesia. No vamos a permitir que expresiones “bondadosas y moderadas” de los grupos económicos concentrados, que en la actualidad atentan contra este modelo, intenten apropiarse de las luchas que encarnamos las mujeres argentinas.

Históricamente, la oligarquía y los grupos económicos odian encarnecidamente a las mujeres cuando éstas ejercen poder para el Pueblo y desde el Pueblo. Evita y Cristina son un claro ejemplo de esta situación.

En este marco, sabemos que en las próximas elecciones se juega el destino de nuestra Patria. Profundizar el modelo significa seguir avanzando, también, en la integración de las mujeres al Movimiento Nacional en marcha. Sabemos que mucho nos queda por transitar para hacer realidad nuestros sueños: a igual tarea - igual remuneración; mayor representación de las mujeres trabajadoras en lugares de decisión; poder de decisión sobre cuántos hijos queremos tener y cómo; creación de guarderías en los lugares de trabajo; vivir una vida libre de violencia.

Esta batalla no es una más. Este 28 de junio, se juega el destino de la Patria. Por eso convocamos a las mujeres porteñas de distintos sectores de la sociedad a sumarse al trabajo para la defensa y la profundización del modelo nacional y popular.

Buenos Aires, 28 de Mayo de 2009.

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